Existen ciertas tendencias naturales que venimos adaptando a nuestra vida cada vez más, casi sin darnos cuenta. Las huertas en casa y todos aquellos extras que nos aportan energía, naturalidad y bienestar se fueron convirtiendo en elementos fundamentales que contribuyen en nuestro día a día. ¿Qué tiene todo esto en común? Su color: el verde.

Año a año hay un color elegido que suele reinar en la moda y en la decoración. Y este año el verde será nuestro color. Nos transporta a la naturaleza, el aire libre, la vida sana, la comida saludable, los buenos hábitos…

Ahora… ¿cómo podemos introducir el verde en la decoración?

Existen muchas fórmulas para aplicar el greenery, como en realidad le llaman a esta tendencia, en la decoración del hogar:

1. Muebles de ratán o rafia en tonos verde oliva, una gran alternativa inspirada en lo vegetal.

2. Pintura: paredes en tonos verdes claros combinadas con blanco pueden aportar una gran luminosidad al hogar.

3. Cuadros y papeles pintados: pequeños cuadritos que retraten naturaleza y hojas sueltas o algun papel que lleve la forma de una planta puede ser una gran alternativa para incluir el verde.

4. Textiles: cortinas, almohadones, alfombras, camineros para las mesas o mantitas.

5. Detalles decorativos: velas, jarrones de vidrio, cajitas para almacenar, pufs, canastos de mimbre.

6. ¡Plantas! La naturaleza nunca falla.