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Mujeres Uruguayas en el Cirque du Soleil: Eri

27 Apr 2016

Ferpectas

¿Querés saber más acerca de cómo funciona la compañía de entretenimiento más conocida del mundo? Compartimos contigo la experiencia de Eri Martinez, quien trabajó en el Cirque du Soleil en su paso por nuestro país.

 

¿Qué fue lo que más te gustó de formar parte del Cirque du Soleil?

El grupo humano que se formó. El respeto, el compañerismo, la solidaridad y la eficiencia con la que se desarrolló todo el mes fue fantástica.

 

¿Cuál fue tu rol de trabajo en el Cirque du Soleil y cómo surgió la posibilidad de trabajar con ellos?

Fui “HeadUsher Assistant”, que viene a ser un asistente de los jefes de acomodadores que trabajaban dentro de la carpa principal, ayudando a supervisar y encargarme de tareas específicas en la carpa de concesiones, relacionadas con la apertura y funcionamiento de la misma, en coordinación vía radio con los HeadUshers.

La posibilidad de trabajar con el Cirque se dio a través de Cantieri Producciones, que es una productora para la que trabajo hace 9 años, a la cual se la contrató por el servicio de acomodadores que ofrece.

 

¿Cómo describirías el ambiente laboral?

Era excelente. Solidaridad, respeto y eficiencia fueron de la mano en todas las tareas, haciendo que ir a trabajar al Cirque fuera realmente un placer.

 

¿Cuál fue el desafío más grande al que te enfrentaste?

Sin duda fue estar a la altura de la tarea que me habían asignado. Los primeros días estuve muy nerviosa, tenía muchísimo para aprender y no quería fallar en nada. Por suerte, siempre estaban a la orden mis superiores, los cuales cada vez que yo tenia una duda, podía recurrir a ellos y evacuarlas con total tranquilidad.

 

Tanto a nivel personal como laboral, ¿cuáles son los mayores aprendizajes que te llevaste de la experiencia? ¿Pensás que podés aplicarlos a tu vida personal?

Mis mayores aprendizajes… Trabajar con respeto y con amor a lo que uno hace. Cada día que llegaba al Cirque, me ponía el handy y me encaminaba a la carpa de concesiones me decía por dentro: ‘¡amo mi trabajo!’

 

El Cirque du Soleil se destaca por su excelencia. Para vos, ¿cuáles son sus claves del éxito?

Sin duda, una de las claves del éxito del Cirque du Soleil es la exigencia por la perfección. Ellos brindan un espectáculo de calidad no sólo dentro de la carpa principal, sino desde el momento en que estás llegando a los alrededores del circo. La gente llegaba agradeciendo y admirando la organización y predisposición que había para que el cliente se sintiera pleno. La cordialidad estaba presente en cada uno de los trabajadores del circo, recibir al cliente con una sonrisa era ley, no solo por protocolo de trabajo, sino porque el ambiente, la energía, la alegría se apoderaba de cada uno de nosotros, y nos daba muchísimas ganas de compartirla con todo aquel que iba a presenciar el Show.

 

¿Tuviste contacto con los artistas? La vida de circo es muy nómada, ¿cómo conviven los artistas con este hecho?

Los domingos, luego de la función, se organizaban fiestas de integración entre artistas y trabajadores locales. Se formaron lindas amistades, intercambios culturales en gran cantidad, muchas risas y por sobretodo muchas ganas de aprender todo, de saber cómo era la vida de esas personas… también organizamos salidas a cenar, paseos y demás.
El idioma nunca fue problema. Si bien muchos de nosotros hablamos inglés, algunos artistas no lo hacen y nos comunicábamos por señas y gestos.. esa parte era sumamente divertida. Nos contaron que si bien no es fácil por la parte de extrañar a sus familias, disfrutaban muchísimo de las experiencias vividas y sus amigos que tienen en el circo.