Finn está a punto de terminar su carrera universitaria y casarse con su novio, a quien ama. Al igual que muchas jóvenes, comienza a dudar y experimenta una crisis emocional que la llevará hasta la casa de campo de su abuela, donde encontrará otras mujeres que le aconsejarán a través de sus propias experiencias de vida.

“¿Cómo sabemos si tenemos que estar con una sola persona toda la vida?”

Finn se cuestiona, duda, tiene temor de enfrentar un proyecto de vida tan importante. A la vez posee la suerte de encontrarse en el lugar indicado. Su abuela y las amigas cosen una manta realizada con parches que cada una debe construir. Cada parche tendrá parte de la historia de cada anciana, que en el proceso le irán relatando a Finn.

“La monogamia es un estado anti natural”

El personaje de Finn muestra a una mujer inquieta y asustada, ¿qué sucede si fracaso? El miedo la lleva a dudar de sus sentimientos más profundos, por eso las ancianas la ayudan a reflexionar sobre qué tipo de actitud debe tomar una mujer en los diferentes sucesos de la vida, si es que hay que detenerse en las dudas o hay que decidirse y tomar el paso.

La historia de cada mujer se va cosiendo, hilo tras hilo, con pausas y a diferentes ritmos, a veces con más colores y en otros momentos con menos, pero el resultado solo se puede ver de lejos.

“Los jóvenes amantes buscan la perfección, pero los amantes con experiencia aprenden el arte de unir las partes y ver la belleza en una multiplicidad de fragmentos, como un edredón americano”.

Recuerdos de amores pasados, 1995.