“En mi juventud me gustaba mucho bailar, predominaba el estilo hippie en mi entorno y me acuerdo que usaba pantalones con tachas. Hoy en día me gusta el teatro y más que nada ver ballet.

Viví en Montevideo toda mi vida y me parece que de 40 años a esta parte ha cambiado, hay más shoppings, calles asfaltadas, y en cuanto a la gente puedo decir que depende mucho más de los equipos electrónicos.

Un sueño que tengo es ir a Bahía en Brasil, me encanta la playa y lo curioso es que casi nazco en una, porque los dolores de parto de mi madre fueron en una playa y al ratito nací.

Tengo 4 hijos y el gran desafío fue trabajar mucho en todo sentido para que tuvieran una profesión y sean gente de bien. Creo que logre las metas en cuanto a mis hijos y mi hogar.

De niña vivía en Maroñas, cerca del Hipódromo, ahora vivo en Zum Felde, cerca de Portones, donde hay muchas cooperativas y comercios. Te cruzas con la gente en los supermercados y en las paradas de ómnibus. El barrio era muy seguro hasta hace un tiempo que empezó la inseguridad dentro de las cooperativas. Igualmente prefiero este barrio, es otro nivel de vida. Mi casa es relativamente nueva, y me encanta. Los domingos nos juntamos a hacer asados, ya tengo nietos y bisnietos. Ver crecer a mi familia me llena de felicidad.”