“Siempre trabajé en peluquerías como empleada. Un día mi hermano me impulsó con la idea de abrir una propia e hizo una inversión en mí y nació la peluquería que lleva mi nombre: Cecilia Herrera.

Cuando inició como negocio empezamos en la casa de mis padres, antes de eso me acuerdo que armaba un espacio en mi cuarto.

Cuando quedé embarazada de mi hija decidí instalarme en mi propia casa y ahora sigo aquí.

Creo que hay muchas cosas que las vas aprendiendo en el camino y con la experiencia, no solo hay que saber las técnicas, sino también escuchar al cliente y entender qué necesita, para ver la idea que trae qué podemos hacer con ella. Por lo menos yo lo vivo así.

Si me equivoco, asumo mi responsabilidad, y le doy una garantía al cliente.

Ahora estoy en el momento de plantearme metas, empecé un curso para emprendedores donde estoy manejando marketing y contabilidad, ya que hasta el momento subsistía solamente.

Mi sueño a futuro es crear un centro estético, con depilación, cosmetología, masajes, entre otros. Ya estoy ofreciendo algo más que solo peluquería, y de a poco me voy diversificando. Mi cuenta de Instagram es @peluqueriaceciliaherrera”.