por Carolina Goldsman

Se acaba de formar la Luna Nueva en Leo, con el Sol y la Luna unidos bajo la energía de fuego leonina. Tiempo de iniciar una nueva temporada, una nueva Lunación comienza y con ella un nuevo foco para expandir la Conciencia.

Este Miércoles 3 de Agosto 2016 se forma la Luna Nueva en Leo con el Sol y la Luna unidos bajo la energía simbolizada por el Rey de los Animales.

El Sol es el centro del Universo y Leo simboliza la energía de nuestro centro humano, el Yo, la identidad, la personalidad, el Ego, el carácter. Así como Cáncer es energía afectiva, y simboliza el útero, la familia, las emociones, y el contacto con el Inconsciente; la energía de Leo implica el emerger de la Conciencia, el contacto con la propia individualidad, con la identidad central, la personalidad, aquellos aspectos que conforman nuestro Yo, y junto a ello la capacidad creativa a través de los dones y talentos.

Dentro del Zodíaco, el León simboliza la vitalidad, el centro, el corazón, la creatividad, la autoridad, el poder de la creación, la generosidad, la fuerza, la confianza. Leo es la energía de la seguridad de la identidad, irradia independencia plena y contacto con el Yo. Por eso, durante el tránsito del Sol en Leo, la expresión de la identidad es la clave, porque la energía leonina busca ser significativa de algún modo y mostrarse hacia el afuera. La sensación de libertad creativa respecto a los demás, de independencia y seguridad del Yo, es lo que brilla desde el centro.

Leo es energía de gran calidez, y una dignidad y nobleza naturales, extravagancia, amor por el lujo y el estilo. Es la energía del Rey, por eso está en el centro. Leo busca el brillo y el reconocimiento del entorno, y el gran desafío de esta energía es integrar el reconocimiento propio, el aplauso interno, y que la autoestima fluya desde adentro hacia afuera (y no al revés). Leo también es energía de alegría, liderazgo, y de búsqueda de la identidad basada en la autoexpresión. Leo es centro, vitalidad, brillo, creatividad. Y es la energía del líder por naturaleza.

Entonces, este nuevo ciclo que comenzamos con la Luna Nueva en Leo, nos abre la oportunidad de tomar conciencia sobre nuestra identidad presente, y todo aquello que hoy identificamos que somos : nuestra energía individual aquí y ahora.

Sea lo que sea que encuentres, es muy importante que tengas presente que durante la Lunación de Leo (este próximo mes) habrá mayor disponibilidad para concentrarnos en ampliar la Conciencia de quienes somos, o mejor dicho, quienes estamos siendo.

Una vez, un maestro hindú con quien tuve la oportunidad de estudiar, el Maestro Shankara, me enseño que dentro de nosotros existe un Yo Pequeño un Yo Superior. Así describió la dinámica entre el Ego y el Ser, dos dimensiones de nuestro Ser.

El Yo Pequeño es nuestro Ego, nuestro carácter, todo aquello con lo que nos identificamos fácilmente como parte central de nuestra personalidad, nuestra forma individual de comportamiento ante nosotros mismos, el otro y el mundo.

Por otra parte, existe el Yo Superior, el Ser, aquella dimensión mucho más amplia, que abarca al Yo Pequeño y es mucho más… Una Conciencia superior de nuestra individualidad como seres humanos, que también somos y muchas veces no vemos.

Solemos identificarnos por demás con nuestro Ego, nuestro Yo Pequeño, y descuidamos las voces de esa entidad mas abarcativa que somos, nuestro Yo Superior, que expresa nuestra energía individual y nuestra unicidad en el mundo desde una dimensión más elevada, desde otro nivel de Conciencia.

Poder desidentificarnos de nuestro Ego, para dejar de limitarnos en la expresión verdadera del Ser, es un proceso que requiere de trabajo, esfuerzo, coraje, y acción… Expandir la Conciencia de quienes somos es un resultado que se da a partir de la práctica, a través de hechos, actos, no palabras ni análisis, ni teorías.

En este sentido, Carl Gustav Jung (1875-1961), un psiquiatra suizo, leonino y antiguo discípulo de Freud, propuso como camino de sanación de la Psique el “Proceso de Individuación”, integrando las enseñanzas de la Filosofía Antigua, la Alquimia, el I-Ching, los Mandalas, los Sueños, también la Astrología, el Tarot, y otros saberes antiguos cuya profundidad y enfoque psicoterapéutico no era comprendido en la época en que vivió.

En este sentido, ha trabajado con muchísimas personas creando praxis de expansión de Conciencia y desarrollo del Ser. Y su obra ha resultado en Luz para la humanidad.

Ahora, entrando en la Lunación de Leo 2016, tenemos la oportunidad de hacer brillar la conciencia del Yo. Además, está más disponible el trabajo para el dominio del Ego, nuestro carácter, especialmente aquellos aspectos o patrones de conducta que oprimen a nuestro Ser y opacas nuestra luz. Por eso, durante la temporada de Leo hay mayor seguridad para emprender actividades de autoconocimiento, para el desarrollo personal y la autoestima.

Es un tiempo para centrarnos en nuestra identidad y potenciar esa fuerza creadora que somos, desidentificarnos un poco de nuestro Yo Pequeño para poder ampliar la mirada sobre nosotros mismos, empoderarnos desde adentro alimentando la vitalidad y aprendiendo que la autoestima es la base principal para crear lo que queremos.

Practicar (y no teorizar) el amor propio es la oportunidad central de este ciclo, y junto a ello el contacto directo con los talentos creativos de cada uno, los dones personales: esos regalos que nos brinda el Universo y que nos hacen únicos, a la vez que alimentan nuestra vitalidad. Nuestros dones y talentos son una gran fuente de energía.

Entonces: es tiempo de prestar atención a quiénes estamos siendo aquí y ahora, percibir la energía de nuestro Yo Pequeño (Ego, carácter, personalidad) y la de nuestro Yo Superior (Ser, dimensión espiritual), para integrarlas y expandir la Conciencia, desarrollar la autoestima, poner en práctica el amor personal a través del contacto con los dones y talentos creativos, alimentar el liderazgo propio y la confianza en nosotros mismos, reafirmar nuestra identidad y ser cada vez más conscientes del poder que tenemos para transformar nuestro mundo a través de la conciencia del Yo. Esta es la energía del momento.

Por todo esto, el Ritual de Luna Nueva en Leo es algo muy simple : regalarte un acto de amor propio, algo que verdaderamente quieras, sea un libro, una planta, o una comida deliciosa, una salida, un masaje, o cualquier cosa que simbolice el amor que te tienes.

¡Feliz Luna Nueva!