Hoy durante la noche se formará el Plenilunio del mes, con el Sol en Piscis y la Luna Llena en Virgo. Las emociones vibran intensamente para que podamos percibir concretamente qué necesitamos ordenar en nuestra interioridad para que nuestro organismo se vitalice. En esta Luna Llena, el Cielo nos regala energía disponible para vislumbrar el camino hacia una nueva maduración emocional, una nueva forma de funcionar desde adentro y hacia afuera, y de esta manera poder mejorar el organismo que somos.

Durante la noche de hoy se formará la Luna Llena en Virgo 2018, con el Sol a los 11º de Piscis unido a Neptuno (planeta regente de Piscis) y la Luna a los 11º de Virgo, ambas luminarias en exacta oposición generando la energía más intensa del mes.

Es importante recordar que esta Lunación abrió con el Eclipse Solar de Luna Nueva en Acuario, amplificando el potencial de cambio, liberación y creatividad de la Nueva Era de vida. Por eso, ahora en Luna Llena, transitamos un momento ideal para tomar Conciencia de aquello que necesitamos ordenar en nuestra emocionalidad para que ese gran cambio de ciclo pueda manifestarse vivamente, saludablemente, establemente, vitalmente. Es tiempo de hacer contacto con la sensibilidad y la intuición para encontrar el nuevo sistema que precisamos hacer funcionar dentro de nuestro Ser, permitiendo que esos aspectos sutiles (aun los dolorosos) florezcan y vitalicen al todo.

El Sol en Piscis unido a Neptuno

La Temporada Piscis es el tiempo ideal para conectar con la profundidad, la sensibilidad y percibir las zonas vulnerables, que se iluminar pidiendo sanación.

Por eso, durante todo este tiempo en que el Sol transita por el Signo de Piscis, el Cielo nos mueve las aguas profundas para que resonemos con el mundo emocional, para bucear en las verdades del Inconsciente y observar lo que merece ser sanado. La Temporada Piscis es para crear Luz a través de la voz del Alma, que nos muestra ahora con mayor nitidez las zonas vulnerables de nuestro Ser, las heridas, los dolores que se iluminan para que, desde la Conciencia, podamos generar un gran cambio.

Ese cambio de estado, de nivel de Conciencia, de lo que elegimos para nuestra experiencia de vida, surge de las necesidades emocionales, de lo que aquí y ahora significa protección de nuestra sensibilidad y realización del amor verdadero, no del amor romántico ni pasional, sino del verdadero cuidado personal, la real y concreta protección de aquellos aspectos más sutiles, blanditos, vulnerables de nuestra existencia.

Tiempo de enfocar conscientemente en aquello que que necesitamos ordenar en nuestra vida a nivel emocional, para limpiar y purificar nuestra energía total, y emprender un cambio desde el Alma. Accionar desde esa íntima autenticidad con el Ser esencial es la clave para sanar aquellas heridas que hoy se iluminan y nos permiten realizar una nueva evolución. Tiempo de habitar en la sensibilidad, incluso aunque duela un poco, porque solo así podemos captar lo que merece nueva Luz, nueva Conciencia, sanar y trascender heridas antiguas, dejarlas en el pasado, para así poder entrar en la Nueva Era de nuestras vidas.

Todo ello se amplifica ahora porque en esta Luna Llena en Virgo 2018 el Sol está unido a Neptuno, planeta que rige el signo de Piscis, generando una mayor disponibilidad de ver, darnos cuenta, crear Conciencia del nivel pisciano de experiencia, nuestra profundidad aquí y ahora, el nivel más sensible de nuestro Ser. Y crear verdadera sanación. Neptuno es el Gran Chamán del Cielo, y ahora junto al Sol ilumina nuestro potencial sanador.

Por eso, hoy y mañana son días cumbres para hechar un gran potencial de luz a esas zonas vulnerables que generan hipersensibilidad y que nos gritan para que las atendamos y brindemos sanación verdadera. En la capacidad de crear Conciencia de esas zonas sutiles, ahí está la llave de la sanación y el cambio que hoy el Cielo nos dispone. Aprovecharlo es cuestión de decidir crear Conciencia, y actuar en consonancia, o no.

La Luna Llena en Virgo 2018 

Percibir nuestra sensibilidad nos permite, además de conocernos, encontrar lo que necesitamos hoy para fluir mejor en la vida.

Cuando se forma la Luna Llena del mes, el Sol y la Luna se sitúan en exacta oposición en el Cielo. El Sol (el Yo, la Conciencia) ilumina a la Luna (el Alma , el Inconsciente) en su totalidad, y eso permite que podamos ver lo que está en sombra. Por eso, los Plenilunios son momentos para tomar conciencia de aquellas cosas que faltan integrar en la Conciencia para crear balance en nuestro Ser aquí y ahora.

Cada Luna Llena es intensamente senadora si aprovechamos la luz plena del Sol iluminando la Luna. Es decir, si nos disponemos a hacer Consciente (Sol) el Inconsciente (Luna). Y ahora, en esta Luna Llena con el Sol unido a Neptuno en Piscis, y habiendo abierto esta Lunación con el Eclipse Solar, hay muchísima mayor potencia de entrar en una Nueva Era de vida, en virtud de lo que elegimos como experiencia emocional.

En esta Luna Llena en Virgo 2018, hay un gran potencial de cambio y evolución si nos disponemos realmente a dar un paso en materia de sanación del Alma. Porque solo así podemos subirnos a esta nueva ola energética, esta nueva frecuencia de vida que el Cielo nos regala para que podamos trascender hacia un nuevo estado, una nueva experiencia.

El Eclipse que abrió esta Lunación, y que todavía vibra adentro nuestro, nos trae la oportunidad de acelerar un cambio completo de vida, dar un salto cuántico, ubicándonos en la realidad desde un completo nuevo lugar, que brota a partir de la Conciencia Vincular. Ahora, en esta Luna Llena tendremos mayor capacidad de percibir cuál es el cambio emocional que estamos necesitando para que esa Nueva Era de vida sea posible, y por eso observar las necesidades físicas y psíquicas que tenemos hoy es la clave.

Entonces, permítete observar todo aquello que esté brotando como necesidad desde tu interior sin juzgarlas. No es ni bueno ni malo, simplemente ES lo que aquí y ahora necesitas. Como la Luna Llena se forma en el Signo de Virgo, energía de Tierra y pensamiento analítico, estarán más presentes temas referidos a cambios de rutina, cambios necesitados en el cotidiano, cambio en hábitos alimentarios, cualquier cosa que tenga que ver con un mejoramiento de la salud, del trabajo diario, o un mejor funcionamiento del sistema al que pertenecemos y creamos.

Observa, observa y observa, sin emitir juicio, es decir, dejando de lado la tendencia por calificar si esta bien o mal tal o cual cosa. Solo así podremos dejar que se manifieste auténticamente la voz sutil del interior, que nos dará la información que necesitamos.

Crear un nuevo orden es la gran oportunidad de este ciclo que ya está emergiendo, en pos de un mejor funcionamiento del organismo que somos.

Piscis es energía de Agua, inestabilidad, sensibilidad, fluidez, caos. Virgo es energía de Tierra, estabilidad, análisis, límite, orden. Ambas energías invocan servicio. Entonces, con el Sol en Piscis y la Luna Llena en Virgo, la oportunidad es que podamos iluminar lo que falta para crear un nuevo orden  propio, integrando dos caras de nuestro Ser aquí y ahora, para brindarnos a los otros y al mundo de un modo más funcional al Todo. Este es un tiempo para crear Conciencia en relación a cómo mejorar el sistema que somos, el interno (nuestro organismo) y el externo (el ambiente que nos sostiene).

Es un excelente momento para limpiarnos, depurar nuestra energía, purificarla. De manera que sería muy bueno dedicar unas horas a prácticas como el Yoga, el Chi Kung, la Meditación, realizar un buen y prolongado baño (en el mar es ideal!), tomar mucha, mucha agua, y comer muy liviano.

En este Plenilunio Piscis – Virgo está presente una energía emocional intensa que nos impulsa a conectar con aquello que nos da nueva estructura, porque solo así podremos efectivamente entrar en la Nueva Era de vida.

Te invito a estar más abiertos emocionalmente, expresarnos, y tomar Conciencia de aquello que para cada uno de nosotros significa estabilidad, estructura, responsabilidad en pos de la sanación del Alma hoy. Así, nuestra sensibilidad se ilumina y podemos percibir con más claridad los límites que son necesarios para crear nuestro propio orden.

Es momento de resonar con esa voz que nos marca el camino para crear un nuevo orden. Es tiempo de descubrir lo que necesitamos ordenar en nuestro caos interno. Tiempo de dar el paso. Porque la Nueva Vida ya está presente. El Nuevo Mundo ya nació.

¡Feliz Luna Llena!