cultura
El Lado B de las fiestas
15 Dec 2016
De pronto, y casi sin darnos cuenta, estamos a 16 de diciembre. En una semana es Navidad y la siguiente comenzamos una nueva vuelta alrededor del sol, un nuevo año, un cambio de ciclo. Ya comienzan a llegar los amigos y familiares del exterior, otros viajan a visitar a los suyos y tratamos de cerrar todos los asuntos pendientes para poder disfrutar en paz y armonía de esta época del año que nos genera de tanta expectativa.
Pareciera que las Fiestas sólo pueden traer alegría, nuevos comienzos y momentos de diversión junto a familiares y amigos. Sin embargo, para muchos, estas fechas remueven situaciones dolorosas causando angustia y hasta depresión. Este padecimiento es particularmente común entre personas que viven solas, ya que las Fiestas se convierten en un recordatorio de su estado de soledad. También son fechas dolorosas para quienes han sufrido pérdidas de seres queridos o para quienes viven lejos de sus familias y no tienen la posibilidad de estar juntos en estas fechas.
El problema, claramente, no son las Fiestas. Simplemente sucede que para muchos se convierten en un recordatorio del dolor que ya llevan dentro de antes. Lejos de querer acercarles una visión pesimista de esta época del año, creemos que tomar consciencia de la problemática es el primer paso para poder ayudar y ayudarnos. Ya sea si estas fechas son difíciles para vos o si conocés a alguien para quien puedan serlo, creemos que el espíritu más puro de las Fiestas está en tender una mano, ya sea para ayudarse a uno mismo u a otro. Por eso, aquí compartimos con ustedes algunas cosas que podés hacer para lidiar con en “Lado B” de las Fiestas:
– Tener expectativas reales: sabemos que es difícil, pero cuanto menos esperes de estas fechas, más podrás alegrarte cuando tengas sorpresas gratas.
– Evitar el aislamiento: cuando estamos mal recurrimos al aislamiento simplemente porque no queremos transmitirle nuestra tristeza a otros. Pero en estas fechas, estar solo solo puede potenciar la angustia. Acercáte a alguna amiga cercana o familiar y comunicáles tu situación. Por otro lado, si sabés que alguien va a pasar estas fechas solo, ofrecéle pasar las Fiestas con vos y tu familia.
– Ver con otros ojos lo que falta: una de los desafíos más grandes es sobrevivir a estas fechas luego de perder a un ser querido. Es un momento en el que lo que falta se siente más fuerte. Pero, si bien ellos no están físicamente con nosotros, sí lo están en los recuerdos, anécdotas y vivencias que hemos compartido. En este sentido, tenemos una oportunidad para celebrar a esos seres queridos que aún no están a través de discursos, canciones, prender velitas, etc.