Tiene 24 años y es sorda de nacimiento. Fue electa como segunda vicerreina de carnaval luego de que la IMM cambiara los requisitos para postularse a Reina de Carnaval con el fin de incentivar una mayor inclusión social. Además, trabaja en el Banco de Seguros y está por recibirse de Tecnóloga Química.

Lejos de definirla, su discapacidad auditiva resalta sus ganas de ver, hacer y compartir. Estuvimos con Danna en Barrio Sur y nos contó sobre su vínculo con la música, su visión de la mujer uruguaya y sus planes a futuro.

Cada tanto tenemos la bendición de encontrarnos con historias que inspiran y ésta es una de ellas.

 

¿Qué es lo que más te gusta del Carnaval?

Me gusta todo porque visualmente me encanta ver los maquillajes artísticos, los vestuarios, los preparativos de todas las categorías, el esfuerzo que hacen año a año para poder salir en Carnaval.  Me emociona la gente integrada ya que ahí no se ven casi diferencias de ningún tipo. Los niños sonrientes saludando, los adultos alentando.

Este año me llenó de emoción una de las murgas que se llama Eterna Madrugada porque cantaron una canción en lengua de señas para integrar a mi comunidad, la de personas sordas. Eso sí es inclusión.

¿Cómo fue tu primer desfile de llamadas?

Muy emocionante, muchos nervios, adrenalina a mil. Una preciosa experiencia con la comparsa Kiamba que fue la primer comparsa que integró personas sordas. Es una lastima que se disolvió y desde entonces seguí hasta ahora con Cuareim 1080 junto con mis amigos sordos.

 

¿Cómo te vinculás con la música?

Aunque soy sorda siempre me gustó el baile.  Mi madre me llevo desde chica a ballet y folclore.  Después, ya cuando era más grande, hice danza árabe hasta llegar al candombe. Para bailarlo, me apoyo mucho en lo visual y en las vibraciones. Por medio de las vibraciones capto los ritmos fuertes como los tambores en Carnaval, aunque no las letras por mi condición de sorda.  También siento estas vibraciones con el samba y la música electrónica

 

¿Cuál fue tu reacción cuando te enteraste que la IMM había cambiado los requisitos para las postulantes a Reina de Carnaval? ¿Te impulsó a postularte?

Me dije bueno, ¡ahora si me anoto! Mi madre como que no quería por la polémica que podía generar. Pero como yo no hago caso a esas cosas, me anoté igual. Me postulé en mi municipio (B) y seguí para adelante. Por supuesto que sabía que habrían comentarios positivos y negativos como siempre los hay sobre temas muy discutidos, pero me dije: quiero que se sepa que yo también, a pesar de mi discapacidad – en este caso auditiva-, disfruto del Carnaval y participio de el.

 

Tu historia puede inspirar a la comunidad de sordos en Uruguay, ¿tenés planes de continuar haciéndolo a través de otras actividades?

Yo no quiero ser ejemplo de nada ni de nadie, lo que si me gustaría es que sepa más sobre mi comunidad y desde mi lugar siempre dejo el mensaje. Tengo muchos sueños que quisiera realizar pero sé que, si no estamos unidos como comunidad, no avanzamos. Esto es así en todas las minorías. Pero si mi historia suma a que se difunda la situación de personas sordas o de otra discapacidad, ¡bienvenido sea!

 

¿Quién es Danna Báez después del Carnaval?

Soy una muchacha, como todas, que termina el Carnaval y sigo en mi rutina, trabajo, estudio, juego al hockey en Asociación de Sordos del Uruguay, integro la Asociación de Mujeres del Vino del Uruguay donde durante todo el año hay actividades.

Como soy muy familiera, disfruto estar en familia, estar con mi novio y salir con mis amigos. Me gusta cocinar, viajar… En fin, soy una persona activa.

 

¿Cómo definirías a la mujer uruguaya? ¿Hay algún denominador común?

Creo que somos como casi en todas partes. Nuestra propia naturaleza hace que seamos luchadoras de la vida, cada una en su propio espacio y realidad del día a día. A mi entender las uruguayas seguimos siendo prejuiciosas y mirando mucho lo que hace la de al lado. Para mi como denominador común, somos camaleónicas, nos adaptarnos fácilmente a los que nos toca en la vida. Se ha avanzado bastante respecto al lugar de la mujer en Uruguay pero seguimos estando un escalón mas abajo que el hombre y se nos subestima bastante como en lo social, familiar, cultural, laboral, político, deportes, etc.

 

De acá a 5 años, ¿dónde te ves?

Me veo viviendo en mi país, formando mi propia familia y trabajando en lo que me gusta. Espero ver mi país más avanzado en inclusión, en cuidados del medio ambiente, que seamos más sensibles los unos con los otros… En definitiva, espero seguir siendo feliz y agradecida con lo que tengo. ¡Y seguir participando del Carnaval!