“Soy venezolana y llevo casi cinco años acá en Uruguay. Me vine por la situación de mi país. Recuerdo que en ese momento armé un Excel de todos los países de Latinoamérica y en la comparación ganó Uruguay, por la tranquilidad, la estabilidad y la seguridad. No conocía a nadie y fue medio locura. Pensé que en el peor de los casos podría irme para Buenos Aires, donde tengo una hermana del alma.

 

Montevideo me cautivó, también descubrí el departamento de Colonia donde tuve un bar un par de años. Luego comencé a trabajar junto a una cervecería uruguaya ubicada en el Mercado Ferrando, en un nuevo proyecto gastronómico que abrirá en Colonia del Sacramento.

 

La gastronomía viene de familia, mi abuelo italiano me enseñó de todo, aunque luego estudié varias cosas, y lo último fue gastronomía.

 

Además de trabajar con la cervecería me gusta organizar cenas de autor en locaciones que van variando. Estas cenas las organizo por temporada, con doce cubiertos junto a la Bodega Los Nadies y además organizo otras propuestas en locaciones que van variando. La promoción principalmente es a través de mi Instagram @ekacocina. Lo mejor es que siempre se aprende cosas nuevas y me doy cuenta que la gente confía en la propuesta. También soy parte de un movimiento llamado Slow Food que trata de usar productos locales, nativos y de compra directa al productor.

 

Existe una movida linda en Uruguay en cuanto a lo gastronómico. Es un lujo poder estar en este boom de emprendimientos nuevos y en el despertar gastronómico del país. Me parece interesante ver lo rápido que avanza en ese sentido y darse cuenta que la gente de acá es abierta a la hora de probar y descubrir nuevos sabores”.