Las manos son una parte esencial en el look de toda mujer, pero las manicuras profesionales son caras y a veces no tenemos tiempo para ir a una peluquería. Por suerte, arreglarnos las uñas en casa para mantenerlas prolijas y sanas es muy fácil y accesible. Compartimos con ustedes algunos consejos para hacernos las manos en casa, en el momento que queramos y sin gastar tanto dinero.

 

¿QUÉ SE NECESITA?

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–  Quitaesmalte

– Algodón

– Lima de uñas

– Removedor de cutículas

– Alicate para cutículas

– Crema humectante de manos

– Esmalte base

– Esmalte de color

– Esmalte sellador

 

PASO A PASO

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Limar las uñas con el largo y la forma que se quiera. Es preferible que la lima utilizada sea de cartón, ya que es más suave y no lastima las uñas como sí lo hace la de acero (las abre y las quiebra).

Ponerlas en remojo. Para ello, se deben colocar las manos en un recipiente con agua tibia. Para generar un momento más ameno se le pueden añadir al agua un par de gotitas de aceite aromático, que suavizarán las manos y brindarán un rico perfume.

Correr o remover la cutícula. Al poner las manos en agua, las cutículas se ablandarán y resaltarán. Correrla es lo mejor, ya que al quitarla inadecuadamente se pueden generar ciertas bacterias en las manos. Para correrla correctamente, es recomendable utilizar un palito de madera o un moldeador de cutículas que sólo retirará la piel muerta que se aflojó con el agua.

Aplicar crema para humectar las manos y las uñas antes de esmaltarlas. Es importante que la crema se esparza sobre todo en el contorno de las uñas, para nutrir la zona trabajada. Luego se debe quitar el exceso de crema sobre las uñas, ya que si no el esmalte no se fijará correctamente.

La base. Muchos esmaltes de base vienen con nutrientes que ayudarán a mantener las uñas sanas. Lo recomendable es elegir aquel que se condiga con las necesidades de las uñas de cada una. La base también emparejará  la superficie de las uñas y no permitirá que se tiñan con el color del esmalte que se aplicará posteriormente.

Esmaltar. Ahora toca elegir el color de esmalte que se desee para las uñas. Antes de aplicarlo se debe hacer rodar el frasquito entre las manos por 10 segundos para ablandarlo un poco (no se debe agitar, porque eso genera burbujas de aire que pueden generar imperfecciones al pintar). Una vez que se seca la primera capa, se aplica una segunda para que el color quede más pleno.

Limpiar imperfecciones. Con un escarbadientes y algodón remojado en quitaesmalte, un hisopo con quitaesmalte o un marcador especial para uñas con quitaesmalte, se pueden limpiar las imperfecciones que se hayan generado en la piel al lado de la uña al pintar.

El sellado. Un esmalte sellador transparente que aporte brillo es el toque final ideal para las uñas. Las protegerá de posibles marcas y evitará que se descascare el esmaltado.